Este documento discute el uso de las redes sociales y la tecnología en la educación. Propone que las redes sociales no deben verse como una distracción sino como una parte integral del entorno cultural de los estudiantes. Recomienda que los profesores usen blogs y Twitter para compartir recursos educativos y mantener un diálogo abierto con los estudiantes, y que los estudiantes usen blogs y Twitter para colaborar en proyectos, publicar trabajos originales y participar en conversaciones sobre temas de la clase.