Un maestro llevó a su estudiante a la casa de una familia pobre que dependía de una sola vaca para sobrevivir. Al día siguiente, el maestro mató a la vaca frente al estudiante. Un año después, el estudiante regresó y encontró que la familia ahora vivía en una casa grande, porque la muerte de la vaca los obligó a cultivar vegetales y ganar dinero. El estudiante finalmente entendió la lección del maestro de que siempre hay que luchar por lo que se quiere y no confiarse en lo que se tiene.